El hombre, que es puente, se ha vuelto obsoleto. Ha inventado la felicidad y le ha dado un valor agregado. Respira con pulmones necios un aire anacrónico, su vida es un cuento corto, un manuscrito pueril e insolente. El futuro es obceno como el arte, no hay otredada que valga, ni angusta que sea bastante para dejar de ver con indiferencia mientras se frotan como perros en las piernas de la civilizacion. Las uñas crecen, insoportables y los gusanos del vacío nublan la vista. Estoy ciego. Ya no soy Dios, pero las viejas costumbres son dificiles de dejar Ya no soy Dios, la saliva pasa Ya no soy Dios, las arañas ya no mueren al tercer día A la mitad de un suicidio, es de sabios arrepentirse... Las manos abiertas ¡VOY!
Querido Lector: Quería dejar el título y la fecha, el relato me parecía autoevidente. Luego, la segunda línea confirmaba lo dicho y quise ponerla entre dos paréntesis (protegen una humilde idea secundaria de acabar eliminada), para que la pobre no se fuera, porque le tomé cariño. Me fui haciendo amiga de la frase, ya no temía -ella- que me fuera a distraer o a arruinar la simple belleza de un título y una fecha: la de hoy. Entonces resolví seguir escribiendo, porque escribir por el placer de hacerlo también produce cosas – A escribir se aprende escribiendo. Se me hace valioso llegar a hacerlo. Te escribo, querido lector, porque es una forma de matar las tardes que acaban prematuramente después de asomar al espejo a una mujer que, en una contracción, puede ser madre de universos alternativos. Desde luego, ¡Cómo no!, Hubiera preferido interactuar, lector mío, que me contaras tú a mi una historia de cualquier lugar del mundo, autobiográficas todas. Sirvan pues estas líneas de palia...
Comentarios
besos
es hermoso!!!!